Dancing to the jailhouse rock

Mientras tanto, todaví­a hay quienes se preguntan qué otra cosa pudo haber salido mal en la tétrica presentación de Chuck Berry en Argentina…

Succión tercerizada

“Steve Jones tocó la guitarra en nuestra versión de ‘Anarchy in the USA“. Llegó al estudio en una moto y con el brazo roto. Cuando entró, lo primero que dijo fue: “Necesito cien dólares y un poco de succión”, que es una expresión slang inglesa que significa fellatio. Le contesté: ‘Steve, te daremos mil dólares y ocúpate tú mismo de encontrar una mujer que quiera tocarte’.

[Dave Mustaine en That Metal Show S04 E01, traducción libre (?)]

En la sección Anécdotas rockeras viejas pero buenas (?), aquí tenemos la proverbial verba codeless del Colorado revelando que Mr. Jones no es precisamente el mejor amigo del jabón. Ahora hay excusa para la temporada baja porque es enero, así que esperen lo peor (?).

La voz del interior

“Mis canciones son personales, no comunitarias. No quisiera que la gente se pusiera a cantar conmigo. Eso sería ridículo. No toco en fogones. No recuerdo que nadie cantara en los shows de Elvis, Carl Perkins o Little Richard.

Lo que tenés que lograr es que la gente sienta sus propias emociones. Un intérprete, si hace lo que tiene que hacer, no siente ninguna emoción. Es una especie de alquimia”.

[Bob Dylan, Rolling Stone interview, octubre de 2012]

El culo sí, la napia no (?)

Rod Stewart reveló que consumía cocaína analmente

Rod Stewart confesó que consumió cocaína, pero no de la manera que todos piensan… “La ponía en cápsulas que luego ingresaba por el ano para no dañar las cavidades nasales”, explicó. Lo que hacía era comprar comprimidos en cápsula para el resfrío que luego partía al medio y rellenaba con esta droga. “El cuerpo humano es maravilloso (?) y las disolvía en su sistema rápidamente”, agregó.

(…) Entre otras cosas, aprovechó para desmentir el mito del supuesto lavado de estómago por el que tuvo que atravesar, tras ingerir litros de semen de unos marineros de San Diego. “Todo fue un invento de mi expublicista Tony Toon cuando lo despedí. Nunca di placer oral a un grupo de marineros ni me realicé un lavado gástrico en mi vida”.

[fuente]

¡Humille, Rod! Fuiste pionero de muchas cosas, incluido el butt-chugging… pero de camer (?). Si este es el adelanto, no me quiero imaginar lo que debe ser Rod: The autobiography, la biografía del susodicho que está por publicarse en estos días.

Igual prefiero al Rod de los Faces, no a este que hace música para ascensores y parece querer tener 20 años eternamente. Creo que los marineros de San Diego deben pensar lo mismo que yo (?).

[gracias Nico_S por este impacto informativo (?) fenomenal]

Solo por hoy

“Una vez en los 90, en El Roxy de Rivadavia y Ayacucho, fuimos a zapar y habíamos consumido un poco de LSD. A eso de las cuatro y media de la mañana, Pappo empezó a tocar un solo y no paró hasta las doce y media del mediodía, cuando le avisamos que nos teniamos que ir”.

[Juanse en la última RS, donde Pappo aparece como el violero argentino nro. 1]

Aún con el omnipresente riesgo de la arbitrariedad, la edición argentina de la Rolling Stone decidió arremeter un interesante aunque parrillero (?) ejercicio y seleccionar cien violeros en la historia del rock nacional. Por si las moscas, la denominación “grandes guitarristas” (ya no “mejores guitarristas”) le hace la guerra preventiva a los reproches (?) y anima a encarar la cosa con ánimo menos beligerante.

Se repasan nombres obvios (donde destaca el Tanito Marciello, que logró meterse en el top 10), músicos injustamente olvidados (Kubero Díaz, Lito Epumer, Willy Gardi y Pino Marrone, entre otros) y también se incluyen algunos rescates emotivos y newcomers que sinceramente suenan a relleno puro (¿Osky Righi?, ¿Tanguito?, ¿Leo García?, ¿Carca?, ¿Gori?).

Pero lo bueno de la dudosa e incomprobable anécdota sobre el votado como violero nacional número uno es que nos permite enterarnos de lo que significa tomar “un poco” de LSD para Juanse (?). Si se lo cruzan re gede (?) en algún lado, tomen las precauciones del caso.

Los muertos que vos matáis

“Al rock argentino lo han matado. Casi no existe más. Está dominado por los sellos y las productoras. El que no entra en esa se queda aislado. No se puede notar si hay evolución en el rock porque siempre son los mismos y en la mayoría de los casos suelen hacer siempre lo mismo. (…)

A las empresas discográficas ya no les interesa vender discos. Y menos de bandas de rock. Van a lo fácil, a lo más comercial e intentan sacar tajada de los shows. Parece que volvimos a los tiempos del Club del Clan, el folklore y la música romántica. A lo sumo incorporaron un pop meloso. (…) Prendés la tele, ves el programa La Viola y cada vez se parece más a Grandes Valores del Tango con Silvio Soldán. ¿Cómo puede ser que la estrella sea el periodista?

(…) No hay lugares para tocar. El juego está en manos de muy pocos para los que es negocio y justamente no son los músicos. Yo no voy a pagar para tocar en el Cosquín Rock. No tengo la guita que piden y no me parece que corresponda. Pero yo no me voy a cruzar de brazos. De última tocaré en mi casa para 70 tipos.”

[un rabioso Alejandro Medina en Miradas al Sur del 19.08]

La atendible posición del legendario bajista de Manal tuvo un intento de refutación, aunque conciliadora, por parte de Maxi Martina, cantante de Error Positivo y conductor del programa El Triángulo de las Bermudas en FM Vorterix. Cada uno se acercará más a la posición que le parezca acertada, pero el debate no deja de ser interesante y saludable.