A los clones, dos por un peso

Sí, fui a ver Episodio II. Grossa. Incluso mejor de lo que esperaba. Lástima que George Lucas no es director de actores sino de CGI, que si no… Parece que tendremos que resignarnos a ver tipos que son de madera encarnando los roles principales de la saga. Repasemos: Mark Hamill como Luke Skywalker en las primeras tres, el niño-actor Jake Lloyd como su padre Anakin en Episodio I (¿se imaginan este papel puesto al servicio de la capacidad dramática de un Harvey Joel Osment?), y ahora el inexpresivo Hayden Christensen en el mismo papel. Y como si hiciera falta poner en evidencia sus escasas dotes actorales, en la comparación con sólidos intérpretes como Christopher Lee, Ian McDiarmid o -en su momento- Alec Guinness pierden por goleada. Pero no es para tanto: la peli es buena, transitando más cómodamente las tonalidades sombrías à la Empire Strikes Back, como era de esperarse. Incluso guarda algunas similitudes en su desarrollo con aquélla, que no develaremos para no arruinar la experiencia. Para fanáticos, por supuesto. Pero para el resto también.